Nuestra Hermandad ha asistido, como parte de la parroquia de San Lázaro, a la I ASAMBLEA que se ha celebrado el 11/11/2023 cuyo lema “San Lázaro Sueña y Camina” ha inspirado a la comunidad que ha asistido.
La asamblea con una excelente organización ha unido, con la alegría con que nos convoca el Señor, a la totalidad de las realidades o grupos que formamos parte de la parroquia. Acto que ha servido para conocer a los componentes y saber las actividades y trabajos que realizamos dentro de la propia comunidad a la que pertenecemos y que en ocasiones se desconocen.
Además, se ha hecho una puesta en común para aportar ideas, propuestas y mejoras que hagan que el barrio y su colectivo social se acerque a nuestra parroquia y forme parte de ella y, de esa forma, se acerquen a los valores católicos que tan necesarios son en nuestra vida, y si cabe, más en la actual situación que estamos viviendo. Todo esto fue tratado en grupos de trabajo que recogieron las apuestas y aportaciones.
Tras una comida compartida entre la mayoría de los asistentes, en la sesión de tarde, se puso en común el trabajo de todos los equipos, aportando los pensamientos, ideas y mejoras que hagan que poco a poco, y con la ayuda de Espíritu Santo, como hicieron los primeros seguidores de Jesús, intentemos entre los miembros de esta comunidad una labor evangelizadora y de unión hacia nuestra fe, los valores católicos y el amor a Jesucristo.
El resumen, recogiendo parte de las ideas dadas en el final de la Asamblea con las palabras de los Rvdos. D. Florencio. D. Esteban y D. Agustín, el éxito de la Asamblea deja una amplia enumeración de propósitos y valientes apuestas que nos motivan a “soñar” en un futuro que acerque y contagie al colectivo de San Lázaro en el que estamos presentes atrayéndolos al Amor de Dios, pero para ello nos tenemos que poner a “caminar” intentando llevarlos a cabo para que el sueño de nuestros propósitos sea poco a poco, y desde la humildad, una realidad.
Este resumen no expresa la unión, sensaciones y satisfacciones que se vivieron y estuvieron presentes entre la comunidad. La fuerza de los Jóvenes asistentes, la experiencia de los mayores y las partes de esa gran parroquia de San Lázaro, nos permitió percibir durante todo el día, una satisfacción personal de convivencia, y una paz espiritual interior por la presencia de Jesús entre todos y en cada uno de los asistentes.
Desde la satisfacción de haber asistido damos las gracias por la invitación, el trabajo realizado y la convivencia de la comunidad lazarina que allí nos convocó y unió como hermanos en Cristo.
