Sobre una alfombra de tomillo que recorría la ciudad de Zamora, la procesión del Corpus Christi volvía a recorrer este domingo las calles de la ciudad y la Hermandad de Jesús en su Tercera Caída participaba junto al resto de cofradías zamoranas para conmemorar la presencia de Jesucristo en la Eucaristía.
Organizada conjuntamente por la Cofradía del Corpus Christi y el Cabildo Catedralicio, la procesión partió de la Santa Iglesia Catedral por su tradicional recorrido hasta la Plaza Mayor donde el obispo, monseñor Fernando Valera impartió la bendición con el Santísimo Sacramento.
Tras los niños de comunión celebrando su participación en la vida activa de la iglesia, representantes de las cofradías de penitencia y de gloria, acompañaban al Santísimo junto con la música de cornetas y tambores y los gigantes de Zamora, además de la Tarasca.